Bueno hoy es un día
especial, un día como el día de la lasagna cuando decidí empezar a escribir
este blog, si es cierto, toda mi culpa el no escribir tan regularmente como
debería, pero juro que aunque a veces se pasan alguna aventuras extraordinarias
por mi vida, hay algunos meses en que solo se pasan el cambio del clima, las
noticias de siempre y no mucho de extraordinario la verdad.
Pero hoy es uno de
esos días en que quiero escribir y contarles muchas cosas porque hoy (
recuerdan que siempre digo que lo que mas espero que me pase es ser
sorprendida?) pues hoy me encontré a mi misma sorprendida, si de cosas
maravillosas que se están tomando el tiempo de caminar tranquilamente como si
no fuera la cosa por mi camino, así como así….
Si lo sé, no les he
contado aun como termino todo después del invierno y el fin de la cosecha, como
regresamos a casa, y como fuimos a esquiar, no les conté de Wellington, ni del
festival de "kiwi can fly"
(curioso por aquello de que los pajaritos kiwi no tienen alas para
volar… y.. Si se los explicare todo después lo prometo), tampoco les he contado
de que empecé a tejer crochet o de que conocí este nuevo amigo de República
checa con el que nos enviamos cartas divertidísimas, o de la primavera, el
verano, y hasta la navidad, de el queso que hice para preparar los buñuelos
especialmente para el día de la velitas, y mucho menos les conté sobre la
navidad o la magnifica fiesta de año nuevo o del día de hoy… y del blog de recetas vegetarianas que empecé
y del otro blog nuevo en ingles que es el gemelo mas o meno idéntico a este que
aun no nació, pero juro que he empezado muchas de estas historias y hasta ahora
no he terminado de escribirlas, así como muchas otras cosas que no termine aun,
como los proyectos con Luisi, algunos libros por leer y la organización de mi
disco duro externo…. Que no crean que no voy a hacer, solo que me tomate el
tiempo descaradamente, para poner todo en orden como se debe prontamente…
Igual hoy les
escribo para contarles que hoy es una día especial, hoy muchas respuestas de
muchas preguntas aparecieron como por arte de magia, hoy crecí y me reconocí a
mi misma y a mi cultura en los ojos y en las acciones de otros, hoy llego la
caja que espere por meses que mi mamá me envío desde Colombia llena de cosas
hermosas y hoy tuve un trabajo que nunca tuve antes por primera vez, y hoy me
sorprendí a mi misma sintiéndome parte kiwi parte orgullosa de vivir aquí y de
que mi corazón de alguna forma pertenezca también aquí, hoy es un día especial
porque Casa también se llama Nueva Zelanda para mi.
Las demás historias
aparecerán pronto sé que se las debo.
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